miércoles, 25 de octubre de 2017

Isaías 45:18




"Porque así dijo Jehová, que creó los cielos; 
él es Dios, el que formó la tierra, el que la hizo y la compuso; 
no la creó en vano, para que fuese habitada la creó: 
Yo soy Jehová, y no hay otro." 


MAPA DE EXPOSICIÓN POTENCIAL AL GAS RADÓN, 
SEGUNDA CAUSA DE CÁNCER DE PULMÓN DESPUÉS DEL TABACO


martes, 22 de agosto de 2017

Sentar un precedente

Hace unos días conocí a una persona con psoriasis. Al verle las manos me causó cierta impresión, tenía las uñas largas y medio desgarradas, en muy mal estado.

Pensé cómo tendría que ser el día a día de esta persona, especialmente teniendo en cuenta que su trabajo era comercial visitando clientes todos los días, dándoles la mano, imposible no mostrarlas. Las personas que salen adelante y se abren camino en tales circunstancias son dignas de admiración.

Me pregunto si Cristo tenía psoriasis en las manos...

A esto alguien podría argumentar de esta forma: ¿por qué tendría que tener psoriasis y no ELA (esclerosis lateral amiotrófica) o depresión...?

No es razonable pretender que Cristo hubiera tenido que padecer todas y cada una de las enfermedades conocidas....

¿Por qué tuvo que ser un hombre en lugar de una mujer? ¿Por qué blanco y no negro, indio o asiático?

¿Cómo sería hoy occidente si Cristo hubiera tenido rasgos asiáticos, ojos achinados, tez cetrina,...? ¿Y si hubiera sido mujer en lugar de hombre...?

miércoles, 2 de agosto de 2017

La enfermedad


A veces me llaman la atención hechos como, por ejemplo, que durante la guerra Crimea, que tuvo lugar a mediados del siglo XIX y en la que se enfrentaron Gran Bretaña, Francia y Turquía con Rusia, morían de cólera más soldados que por las balas, los sables y las bombas. 

Retrospectivamente, 170 años después, es fácil proponer soluciones, hoy evidentes, a tales problemas. 

Dentro de 20, 30 o 50 años, una vez la humanidad haya encontrado un remedio contra el cáncer, miraremos atrás y nos preguntaremos con gran asombro cómo no fuimos capaces de haber entendido la enfermedad mucho antes y, de esa forma, haber librado a millones de personas del sufrimiento gratuito, físico y emocional, que conlleva. 

Este es el camino de la enseñanza de nuestro Padre del cielo, que nos ama. 

Millones de seres humanos han de padecer enormes sufrimientos y una muerte prematura para que los demás podamos aprender.